Muchos padres y educadores se sienten sorprendidos y quizás hasta desbordados, por ciertos planteos de los niños pequeños.
Algunos adultos prefieren frente a estos temas dificiles el silencio, la mentira piadosa o simplemente la evasión de los mismos.
Otros, más conscientes, buscan enfrentar estos temas y canversarlos con los chicos.
Nuestro deber como responsables es tratar de reflexionar y buscar respuestas junto con ellos.
En este libro se esbozan pistas sobre cómo actuar en estas situaciones y se abren caminos para la reflexión.
